Esta es la pregunta que se hace todo comprador y todo vendedor.
El distanciamiento social y la cuarentena, aunque necesarias, serán muy duras para los miles de pequeñas empresas y autónomos que forman la columna vertebral de la economía española.
Aunque todavía es pronto para determinar qué consecuencias tendrá sobre el sector inmobiliario, la crisis sanitaria que se está viviendo a escala mundial, se espera una recesión general a corto plazo que provocará una abrupta caída de la actividad económica. Lo que sí se sabe es que España puede encontrarse ante tres tipos de recuperación, la denominada en "V", es decir, muy rápida y que suele tener lugar tras al superación de crisis muy limitadas en el tiempo, como en la que estamos inmersos; una recuperación en "U", más lenta y diferida en el tiempo, lo que supone un efecto negativo persistente en el tiempo o por último, en el peor de los casos, una recuperación en "L", lo que implica una recesión de la economía y su posterior recuperación. Es fundamental evitar que sucedan estas dos últimas opciones y, para conseguirlo, se deben poner en marcha todas las herramientas disponibles tanto desde los sectores de actividad como desde las autoridades gubernamentales.
Lo que sí es seguro es que se trata de algo temporal, aunque imprevisible. Es una situación controlada en el tiempo que, seguro, implicará una ligera bajada de los precios de forma general en todo el territorio nacional.
Desde grupo GESPAIN, estamos de acuerdo con otros compañeros de profesión en el que se prevé una regularización de los precios en el mercado ya que los propietarios volverá a tener una relación más equilibrada con los compradores, algo que no sólo es positivo, sino que además era necesario. También es probable que, debido a la situación económica de los propietarios, algunos tengan la necesidad urgente de vender para hacer frente a la falta de liquides, aplicando rebajas más agresivas en el precio para conseguir una venta rápida de sus inmuebles en el corto plazo.
Pensamos en que habrá una suspensión de las decisiones de compra, pero no una cancelación de las operaciones de compraventa, lo que da a entender que cuando esta crisis sanitaria acabe, el sector volverá a reactivarse, lo que supone una gran ventaja con respecto a otros sectores que se verán claramente afectados, y cuyo negocio es irrecuperable como es el caso del sector turístico y de restauración, entre otros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario